¡¡¡VICTORIA!!!

A mi la política me llama la atención, no lo puedo negar, a pesar de saber lo sucia que es, en esencia es parte mas que importante de las sociedades actualmente. Podría hacer un blog dedicado a ella, hablar de política una y otra vez, pero eso es lo que uno escucha y ve en la tv, radio, periódicos e internet. Todos los días se habla de ella, por lo menos aquí en Venezuela es así, somos un país altamente politizado, y no quiero entrar en detalles, pero en los últimos años la política ha influenciado mas a la gente que cualquier otra cosa, algún desfile o asamblea se muestra por televisión y tiene una alta audiencia, como si fuera un concurso de Miss Venezuela; por ejemplo la lista mundial de Trending Tags (Temas Populares) de Twitter se llena de la increíble división venezolana que existe actualmente, uno sale a la calle y se habla de ese tema político como si alguna película nacional hubiera ganado un Premio de la Academia o algo así.

Entonces, mi idea con este espacio libre que tengo, no es transmitir lo mismo que los medios convencionales, sino entonces ¿cuál sería la diferencia?, pero ayer viernes ocurrió algo en el tema político que a mi me impactó, quizás por mi atracción natural hacia ese tipo de cosas, un acontecimiento que no sucede todos los años algo que marca un fin de una era y el comienzo de otra: la renuncia del presidente egipcio Hosni Mubarak. 

Es cierto, es una noticia mas que conocida, y nos la van a meter por los ojos hasta mas no poder, los periodistas le sacarán el mayor jugo posible a ello, pero no hay que negar la fuerza social que tiene. Imagínense estar 18 días en una plaza durmiendo y comiendo, pero sobre todo PROTESTANDO, para que el presidente de TU país RENUNCIE!. No estabas en tu casa ni nada parecido, estabas a la intemperie y con muchísima gente desconocida pero que al conversar un poco con ellos resulta que piensan muy parecido y por eso están ellos ahí también contigo luchando por una misma causa. Y al cabo de esos días veas en la televisión que todo el esfuerzo que tu y tantas personas hicieron valió la pena, GANASTE!. 

En el tiempo que llevo viviendo en este mundo, no había visto algo parecido, sé de la historia del muro de Berlín, de la caída de la URSS y de otras tantas que sucedieron cuando yo no existía o estaba muy muy pequeño. Para mí es la primera demostración que la unidad de.... disculpen lo populista que sonará esto..... un pueblo, puede lograr los objetivos que se propone así sea contra el poder mas grande, que alcancen a hacer tanta presión como para obligar a un presidente a tomar medidas drásticas. Porque he ahí el detalle de enfrentarse a un "poder" que se cree invencible, nunca se va a rendir de buenas a primeras, así como la gente lucha, ese poder también lo hará y lo peor de ésto es que es el que tiene la mayor potencia para hacer mas daño, y es en ese instante cuando se pone a prueba la voluntad y convicción de quienes batallan por sus ideales.

Si logran su meta, entonces llega la VICTORIA. El júbilo se apodera de los corazones de los que lucharon, y los que no lograron llegar a sentir esa satisfacción, porque sus vidas fueron apagadas por los deseos y avaricia de aquel "poder" que se creía imbatible, serán recordados por ayudar a cumplir ese sueño compartido entre millones de personas. 

Admiración es lo que merece ese pueblo milenario, una de las raíces de la civilización humana. Fue un mensaje para ese "Occidente" que los creía blandos y sumisos, que los imaginaba desdichados y cobardes, y que a pesar de saber ello aprobaba y complacía al opresor, sólo por diplomacia y política.

Oriente Medio pareciera estar despertando, África pareciera estar abriendo los ojos y viendo una luz al final del túnel, sólo espero que la alcancen y que nos sirva de ejemplo a nosotros aquí en Latinoamérica. Nosotros creamos nuestra propia sociedad, así deben ser las cosas, sin intervención de nadie, por muy poderoso que sea.

Mis respetos a los egipcios que momificaron el atraso y reviven las esperanzas de cambio.

Honor, a quien honor merece.